OPINION. El micrográfico es un cáncer que se está propagando por Barrios y Comunidades. En esos sectores existen personas que se están dedicando a usar jóvenes para insertarlos en ese bajo mundo prometiéndole mejor vida, dinero fácil, y crean un liderazgo en todo el alrededor de dichas comunidades, se muestran dadivosos y solidarios con el único objetivo de buscar protección. Esta es una práctica que es muy común en este delito. Las consecuencias de permitir que esto pase son diversas entre las que podemos citar, dificultad en la persecución del microtráfico y apresar a los delincuentes que promueven las ventas de drogas, incremento en la adicción en jóvenes, el reclutamiento de personas para la venta de drogas, familias destruidas y separadas, muerte, cárcel, inseguridad, robo, violación sexual.
En el tiempo que tengo trabajando como representante del Ministerio Público en este Distrito Judicial de Barahona, he visto como madres y padres vienen desesperados a buscar protección porque sus hijos adictos a las drogas les roban, les maltratan física y verbalmente, le destruyen propiedades todo por el afán de conseguir dinero para su acción (este drama lo vivo siempre y que pena que esto pase); también he visto homicidios y robo y casi siempre hay un consumidor detrás desesperado por saciar su vicio.
Estas son muchas de las causas que me han movido a luchar en contra de este cáncer. En esta lucha he tenido muchos enemigos, algunos de ellos se mantienen ocultos, he recibido críticas, amenazas y muchos amigos se me han alejado por el temor de ser agredidos, aunque algunas personas cercanas a mi han sido objeto de persecución y amenazas. Sin embargo, está la otra cara, quiero que sepan a aquellos que creen que estamos solos que hemos recibido fuerte apoyo de una sociedad que quiere que sus hijos crezcan fuera de las drogas, que puedan estudiar, hacerse de una profesión y que caminen en las calles seguras. Ese apoyo viene de abogados, comunicadores, periodistas, jueces, iglesias, juntas de vecinos, líderes comunitarios, policías honestos, amigos, familiares, vecinos, etc.
Estoy decidido a mantener el reto, se cuáles son las responsabilidades de mi cargo y las consecuencias del mismo a la hora de ejercerlo. Pero así mismo digo a aquellos que tienen pensado impedir que haga mi trabajo no lo van a lograr porque siempre actuó apegado a la ley y las buenas costumbres, pero que también defenderé mi vida, la de mi familia y amigos.
Espero seguir contando con el apoyo de la gente sana, prudente, fuerte y sabia, de aquellos que tiene la esperanza de que las cosas cambien y marchen bien, de aquellos que creen en Duarte y en aquellos grandes hombres y mujeres dominicanos y dominicanas que han dado sus vidas y bienes en favor de la patria.
Siempre se puede dar más, no te detengas.
LIC. YVAN ARIEL GOMEZ RUBIO, Procurador Fiscal.
